Cuando descubrimos que existe una idea a la que sin haber
desarrollado el significado pero habiendo sido el camino a la puerta de entrada, a una línea de espacio tiempo, donde libertad del pensamiento flota e n la abundancia del saber oculto del
ser, abriendo el mundo que desea emerger. E intenta a veces
permanecer, para no ser mal interpretado,
mal comprendido o mal usado…
Logramos un descubrimiento, paralelamente a otro
descubrimiento donde vive un permiso Jamás
Habitado en la capacidad que guardan las emociones de todos los huecos que
habitan en nuestro ser
Donde sus complementos
el amor y la belleza atrapan las mismas líneas, parpadeo insólito e increíble, un hallazgo casi imperceptible, casi incomprensible, la raíz tocando la
corona. La unión de las puntas a los
centros llegando así, a la verdad de la propia existencia..
Maleando cuanta resolución vacía exista, siendo participe de un cambio magistral, al aflorar en cada célula un compromiso
completamente diferente con el arte del
manejo de la energía vital que procede de la virtud de la creación, el detalle de las causas y efectos así como
una ley primordial, si no fuesen esas las palabras o los pensamientos ya creados, al explorar un sentido, reinventándolo viable,
desintegrando todas las partículas que por el pasen, ya que en ese mundo solo habita la idea del
creador y el mismo sabe que el mal y el bien en antagónica forma co existen
y co llevan de ese mundo la gloria o el fracaso...
Siempre y en el mismo sentido, al haber podido desintegrar
la pared conductora * reveladora y
habiendo entrado a la
voluntad del universo, donde el mismo es
llamado para contribuir en beneficio propio ya que
de forma insignificante o significativamente visible por aquella divinidad la
que supuestamente existiera, al darnos
cuenta que las potestades comienzan de abajo para arriba y de arriba para
abajo, como un intercambio en las
formas constantes e invariables,
satisfaciendo la sintonía del tiempo, sin límites, fluyen y refluyen al ser estas invocadas por la luz… dando solo importancia
a la ampliación visible en la revolución de los estados del espíritu
y la materia. y, no solamente preservar toda la belleza creada, sino, enaltecer cada movimiento en el desarrollo
sucesivo---
M.V.G.