viernes, 24 de agosto de 2012

Dividimos la realidad o creamos otra, sobre nuestras propias bases


 

 

Dividimos  la realidad?   El calor del frio?  La inmensidad  de,  la  pequeñez?

Lo bueno  de, lo malo lo lindo de,  lo feo?

Cuando son solo grados como lo explican los textos más antiguos.

Es todo lo descubierto por el hombre tan contradictorio que he decido apuntar algo más que una educación lineal de la que mantuve un estrecho vínculo y casi me ha destruido.

Por lo que estoy regenerando la posibilidad de autoabastecer desde el conflicto creado a, una incrementada  analogía de vida,   perpetrando solo  aquello que sienta desde lo consiente y verdadero para nutrirme salvando las distancias que se dividen en la gran elocuente forma de sentir, revisando los detalles de la prosperidad así como los de aquellas cosas que redimen el poder  de la verdad, mostrando cuanto esté a mi alrededor investigando desde mi propia ignorancia, e incidiendo a la perpetua  creación, nada está por casualidad en este momento de mi vida,   de cuanto he vivido  hube aprendido, existe un lugar una hora en el tiempo lineal que llevo para que entre los paradigmas creados fueran una parte tal vez de la línea  que une la verdadera realidad con la  posible realidad que mantuve en mis más anhelados sueños,   cada ser rige su vida sobre conceptos que han creado otras personas (obsoletos) o no tanto y la han legado en algunos casos de forma ininterrumpida, ya es hora de crear el porvenir.

Recuerdo mi adolescencia con duendes y hadas permanentemente fluyendo entre la  pacha mama  y la altura a la que llegaba,  que no siempre  era la misma,  sin amigas con apariencia  real,  mis amigas fueron y son los grandes y frondosos  árboles  arbustos  con aromas, flores  y lo invisible como realidad material,  de ellos he aprendido y aprendo a rever mi vida como a pulir mi mente, la interacción en la otra parte del mundo hace que afiance más la del  mundo que se está creando, no estando convencida del entorno donde habito, es que le han  quitado la sonrisa a las calles donde pisan mis pies,  la luz al cielo y por lo general en las noches la misma  oscuridad  es la que cubre  a la luna y las estrellas donde guardo al Amor, los sueños que no fueron plasmados una sintonía sutil de irrenunciable sensación indefinida de armonía , albor que emana  la pureza en ese aire ligero, donde la  música y su influencia deja que vea y sienta con los ojos abiertos o cerrados,  tanta dicha existe en los instantes de observación que muchas veces no deseo volver a la misma realidad que abito como ser., pero sé que existe un motivo por lo que mi existencia habrá tenido  que ser de esta  manera conformándome como  un  ser humano más.


Sintiendo que cada día estoy dejando a un ser humano menos,  desde la apreciación y concepto que eh elegido sin tiempo y con un espacio diferente en otro lugar,  aunque la apariencia sea la misma es que de otra manera no podría seguir viviendo esta realidad humana.
La necesidad ante la  interfaz de la vida y la muerte tal vez sean la misma cosa, un estado de espiritualidad a un estado de materialización con las mismas  actitudes pensadas o emanadas de la materia o el sueño.  

M.V.G.

 

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